En el corazón de la ciudad de Chihuahua, sobre el antiguo Paseo Bolívar, se alza una mansión que parece detenida en el tiempo. Sus torres, vitrales y balcones de hierro forjado evocan un susurro europeo en medio del desierto: la Quinta Gameros. A primera vista, parece sacada de un cuento de la Belle Époque; pero detrás de sus muros se esconde una historia de sueños, exilio y arte.

Historia

El sueño de Manuel Gameros

A principios del siglo XX, el ingeniero Manuel Gameros Ronquillo soñó con construir una casa digna de las grandes familias de Europa. Inspirado por los palacios franceses que conoció en sus viajes, adquirió un terreno en 1907 y encargó la obra al arquitecto colombiano Julio Corredor Latorre. El resultado fue una auténtica obra de arte en piedra: una residencia de estilo Art Nouveau, adornada con curvas, flores talladas, cúpulas y vitrales que filtraban la luz con un resplandor casi mágico.

En noviembre de 1910, justo cuando la casa estaba lista para ser habitada, la historia dio un giro inesperado: la Revolución Mexicana estallaba. La familia Gameros, cercana al régimen porfirista, tuvo que huir al exilio antes siquiera de disfrutar su nueva morada. La mansión, recién terminada, quedó vacía… y pronto sería tomada por los revolucionarios.

⚔️ Años turbulentos

Durante los años siguientes, la Quinta cambió de manos y de propósito muchas veces. Fue ocupada por los villistas, convertida en cuartel, luego en sede gubernamental y más tarde en oficinas del Poder Judicial y de Educación. Sus muros presenciaron juicios, reuniones, decisiones políticas… y poco a poco el eco de las risas familiares se transformó en murmullos oficiales.

Pero la belleza del edificio resistió el paso del tiempo. Aunque su dueño nunca volvió, la casa sobrevivió —y con los años, Chihuahua la adoptó como símbolo de su historia.

️ Renacimiento cultural

En la segunda mitad del siglo XX, la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) tomó posesión del inmueble y lo transformó en un Centro Cultural Universitario. Hoy, la Quinta Gameros resplandece nuevamente: sus salas albergan exposiciones de arte, conciertos, talleres y muestras fotográficas. Los visitantes caminan por los mismos pasillos donde alguna vez se oyeron valses y conversaciones en francés, y ahora encuentran vitrinas llenas de historia, muebles originales y obras de artistas locales.

Entre sus tesoros destaca la Colección Requena, un conjunto de muebles Art Nouveau provenientes de París, perfectamente conservados. Las curvas de la madera y los detalles en bronce parecen dialogar con los vitrales y el parquet, como si todo el conjunto respirara la misma elegancia centenaria.

La experiencia de visitarla

Entrar a la Quinta Gameros es sumergirse en otra época. La escalera principal, de doble brazo, se alza como una espiral de madera y mármol; los techos altos invitan a mirar hacia arriba y perderse en las molduras. La luz entra tamizada por los vitrales de colores, tiñendo el aire de tonos dorados y verdes.

Afuera, los jardines y la fuente central ofrecen un respiro, un rincón ideal para sentarse y contemplar el pasado. Quienes la visitan suelen coincidir en algo: es uno de los lugares más fotogénicos de Chihuahua. Cada rincón parece diseñado para ser admirado.

️ Información útil para viajeros

Dirección: Paseo Bolívar 401, Centro, Chihuahua, Chih.
Horario: Martes a domingo, de 11:00 a 17:00 h (consulta horarios actualizados).
Entrada: General ~$29 MXN; descuento a estudiantes e INAPAM; domingos entrada libre.

✨ Una promesa de amor

La Quinta Gameros esconde una historia trágica y linda de amor, si quieres conocerla Kawi tours te invita a que nos contactes para que podemos acompañarte y disfrutemos juntos de la quinta y su historia en vivo y a todo color, no te arrepentirás.